26 diciembre 2008

Un proyecto televisivo que quedó en la nada

La revista Barcelona se ha convertido en el más polémico producto de la prensa independiente argentina después la crisis del 2001. Son periodistas profesionales, que vinieron al piso éste año, y declararon funcionar como “una banda de rock”. Su fórmula es el humor políticamente incorrecto, la parodia de los medios tradicionales y los principios periodísticos, y su agenda de notas falsas está marcada por la coyuntura diaria.
Para el año 2006, presentaron un programa de televisión con las características de su humor. Habían armado en I-Sat "Los Anales de la Revista" pero éste que subimos ahora al blog es un proyecto mucho más avanzado. Todo navega en el misterio porque eso nunca fue levantado en algún medio pero el piloto del noticiero ya lo grabaron y alguno lo subió en youtube tipo consuelo para los ácidos escritores. Fernando Peña era uno de sus conductores y ésto decía en un reportaje hace un tiempo:
- Cómo fue la experiencia de grabar un piloto con la gente de la revista “Barcelona”?
Muy entretenido. A la revista la leí siempre. Cuando me dijieron que era con (Marcela) Pacheco, me cagué de risa, ya que me hace reir mucho en el noticiero de ATC (sic). Yo había hecho varias cosas con la Pacheco; grabamos los avisos de Aeropuertos Argentina 2000. Veníamos de divertirnos grabando. La experiencia me divirtió. Me gusta mucho hacer de tonto, más de lo que soy. Mi personaje es un bobo, un tonto. Para hacerlo, me inspiré en Carlos Montero de CNN. El personaje es como un boludo que cuida las formas exageradamente y hace muy buen pandan con la sacada de la Pacheco.
Además, me gusta por que están colgados, en un momento, no saben ni lo que leen. Me entretuvo mucho
- Qué te parece que puede pasar con este tipo de humor en la televisión?
Ya está un poco hecho. Lo que pasa es que la idea da para ir mucho más allá, saturar las tintas con el humor negro. Todavía nadie se animó a eso. En el humor negro y en el sarcasmo. Por ejemplo, una parte de: Mono !!! y me ladra una perra ó en la marcha de los pedófilos, es muy gracioso. Me gustaría que no se develara tanto en la redacción lo que luego haremos en el piso. Hay que pulir cosas, pero está ahí. Es muy divertido. Me gustaría hacer móviles; creo que vamos a ampliar. Tiré unas ideas para hacer móviles truchos, correr tras un estrella hospitalizada, etc. Pero la idea de mi personaje es que el tipo siempre guarde las formas; un imbécil a sueldo que lee cualquier tipo de noticias que le ponen por delante
- ¿Cómo fue la relación con la gente de Barcelona escribiendo para vos?
Muy bien. Fue un alivio. Siempre escribo mis cosas. No me gusta hacer cosas de otros en el teatro, pero en la tele, si. Además son muy graciosos por lo que soy un gran consumidor de la revista.
- ¿Un programa semanal o diario?
Yo creo que se puede hacer un programa de media hora diario. Es un noticiero que pasa revista irónicamente, sarcásticamente y sacándole el jugo al lado medio cruel y oscuro de la noticia. Las revistas es como que ven el mundo al revés y se trata de justificarlo.
Dejamos las dos partes del piloto en éste posteo en un noticiero desopilante que incluso podría haber sido mucho más cínico si se proponían. Los Marleys, los Tinellis, los Julio Ricardo, los Graña, tienen un lugar en la pantallita y con el proyecto original de Barcelona TV no pasó nada. Un reflejo de lo que pasa en los medios hoy en día.

En el contexto de la crisis del 2001, una gran mayoría de argentinos quería salir del país. Uno de sus principales destinos: España. “La gente estaba sin trabajo, haciendo colas en las embajadas. Barcelona era considerado la meca del arte y muchos se iban para allá. Nosotros decidimos hacer nuestra Barcelona en Buenos Aires”, dice Ingrid Beck, directora de la publicación. Y pusieron de eslogan: “Una solución europea para los problemas de los argentinos”.

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